Redacción Noticias 20 enero, 2020

No es aislado, es uno más de muchos hechos ocurridos, donde un grupo de Rugbiers atacan en patota y matan. Ocurrió en la ciudad balnearia de Villa Gessel, donde un grupo de once deportistas fue desalojado del boliche por reiterados episodios de violencia y una ves afuera atacaron en patota al joven acecinado, de 19 años, hijo único, oriundo de Capital Federal.

Según los especialistas, que opinaron profesionalmente sobre el tema, “Los rugbiers en general tienen un código de ética bastante estricto dentro del campo de juego, no se entiende por qué no lo aplican afuera”, dijo una de las psicólogas consultadas. “El factor grupal y un posible prejuicio de clase, acelera el desenlace de estos hechos”, concluyó.

“En el momento en que suceden las cosas el individuo que está en grupo no puede ponerse en contra de los demás. A veces, hay uno que dice ‘paremos’, pero el resto sigue y entonces esa persona se une al grupo, yendo incluso contra sus creencias o convicciones. Y pueden hacer cosas que están más allá de su ética, se van al diablo, porque sólo porque los arrastra la emoción colectiva”, precisó. “Las emociones, positivas o negativas, como en este caso la agresividad, se contagian a todo el grupo”, afirmó Antonini.

Los detenidos fueron identificados como Matías Franco Benicelli (20), quien de acuerdo a los testimonios y averiguaciones practicadas resultaría ser uno de los autores del presente hecho, Ayrto Michael Villaz (20), Macimo Pablo Thomsen (20), Luciano Pertossi (18), Lucas Fidel Pretossi (20), Alejo Milanesi (20), Tomas Enzo Comelli (19), Juan Pedro Guarino (19), Ciro Pertossi (19), Blas Sinalli (18) y Pablo Ventura (20).

Se sienten físicamente superiores, dicen los expertos, actúan en patota y muchos de ellos tiene caca en la cabeza. La UAR lamentó la muerte del joven, pero no basta, hay una larga lista de hechos de similares características.